lunes, 20 de agosto de 2012

Argumentación

Ejes

Eje 2 – Martínez: El periodismo vuelve a contar historias
Martínez destaca que para corregir la realidad, transfigurada es uno de los deseos del narrador. Pero para que la corrección tenga sentido, debe haber una realidad previa pensando, ejerciendo una fuerza de gravedad, sobre la imaginación del narrador.
Con respecto a esto, se destaca las necesidades que tienen los no videntes para sentirse incluidos en la sociedad y, además, los esfuerzos que realiza el Centro Luis Braille para llevar esa inclusión adelante.
Otro punto fuerte de Martínez es que “toda escritura es un pacto con el lector”, y que “en la escritura periodística, el pacto está determinado por el lugar que ocupa esa escritura: ese lugar es el lugar de la verdad”. Justamente en base a esto lo que decidí sobre mi investigación es dejar hablar a los actores principales evitando recurrir a adjetivaciones personales.
Por último, Martínez explica que “si las ficciones verdaderas reflejan una conciencia plena de la época de producción es porque su origen deriva de hechos que definen esa época”. Este punto me dejó pensando. La exclusión social a los discapacitados (sea cual fuera su discapacidad) es un tema recurrente en la historia de la sociedad mundial, justamente por eso consideré mi tema de investigación algo más que oportuno y darle voz a los que, quizás, no la tienen. 
Eje 4 – Ochs: Narrativa
Según Ochs los relatos tienen que ver con sucesos dignos de ser mencionados y mantienen el objetivo de organizar la construcción de los mismos manteniendo una evaluación moral de un hecho, de una acción, de un estado psicológico, acerca de esto considero que el tema de mi investigación, sobre el cual hace hincapié mi aguafuerte es algo digno de ser mencionado ya que es un especio hacia la inclusión de personas que tienen necesidades sociales al igual que nosotros. Justamente en el texto ahondo en ese aspecto, buscando “tocar” al lector y que se ponga en lugar del no vidente, buscando hacer algún estilo de transferencia.
Uno de los tipos de conductas que describe Ochs es bajo una cita a Bruner el cual explica como eje un suceso principal que perturba el equilibrio de las circunstancias ordinarias y esperadas, yo a esto lo tomo justamente por el lado de la inclusión social que vengo destacando en los puntos anteriores.  
Eje 5 – Chillón: Textos facticios
Chillón destaca que “se eliminan los contornos precisos de hechos y situaciones auténticas para conferirles una suerte de condición legendaria que los extirpa en parte del discurso histórico y los traslada a una especie de mundo mítico, casi utópico y acrónico” algo que, quizás de manera inconsciente, desarrolle en mi aguafuerte, no dando indicios firmes de fechas sino más bien un parámetro en los días de la semana y nada más, lo que transforma la narración en algo totalmente atemporal. 

viernes, 17 de agosto de 2012

Narración

Aguafuertes
Con los ojos del alma

Mi vida no es como la de los demás. Desde que nací fui diferente y tuve mis limitaciones. Siempre necesité ayuda para hacer mis cosas como, por ejemplo, para cruzar la calle. Desde chico fui a una escuela donde todos eran como yo, pero yo sabía que nosotros no éramos como el resto del mundo, no veíamos el mundo a colores como los demás, directamente no veíamos.
Más allá de no poder ver, siempre fui una persona normal. Tenía mis limitaciones, es lógico, a medida que fui creciendo fui lanzándome más a la vida. Comencé a jugar al fútbol en una escuela especial, salía con un pequeño grupo de amigos que me había hecho jugando a la pelota, escuchaba música y hasta intenté tocar algún instrumento musical.
Podía decir que a mis 16 años llevaba una vida prácticamente normal. Sin embargo, siempre se suscitaba el mismo problema. Mis hermanos tenían la costumbre de ver una película después de cena. Yo intentaba acercarme a la televisión y ellos describirme lo que veían. Sin embargo, luego de varios minutos ellos se cansaban de hablar y yo me quedaba con las ganas de escuchar.
Ese fue un tema que muchas veces discutí en casa, pero por más voluntad que mis hermanos querían poner, siempre me quedaba sin “ver” la película.
No fue hace mucho tiempo, quizás hace tres años. Mi mamá llegó de la calle con una noticia para contarme. Ella había leído en el diario que la gente del Centro “Luis Braille” había estado trabajando en un proyecto de películas para ciegos y que este viernes se estrenaban a las 14 horas. En ese momento sentí una gran alegría. Estábamos a miércoles y solo faltaban 48 horas para poder ir a ver una película. Ni siquiera me importaba cual  sería. Tampoco recuerdo haberle preguntado a mi mamá, y si me lo dijo, no la escuche por la emoción que tenía.  
Fueron los dos días más largos de mi vida. Era algo nuevo para mí. La incertidumbre de saber cómo sería transitaba por mi cabeza varias veces por hora y, por más que pensaba, no lo podía imaginar.
Finalmente llegó aquel viernes. Recuero  no haber dormido, o haberlo hecho muy poco la noche anterior. A medida que pasaban los minutos me encontraba más contento y en mi casa se vivía un ambiente diferente, como aquel día en que mi prima decidió casarse, va una coma este viernes también era un día festivo.
Almorzamos rápido, me bañe y para cuando salí al baño recuerdo haber identificado los olores de mis padres y mis dos hermanos, se sentían bien perfumados y yo me los imaginaba a todos de saco y corbata, vestidos de gala.
Salimos de casa caminando, estábamos cerca del lugar donde emitían la película “El secreto de sus ojos”.  A pesar de que sabía que mis hermanos la habían visto en el cine,  decidieron acompañarme igual, era un plan para toda la familia.
Cuando llegamos, recuerdo que les ofrecieron la oportunidad de taparse los ojos con una venda para que puedan sentir la película de la misma forma. Nos sentamos en nuestras butacas y pocos minutos después el filme comenzó a correr. Las voces, las descripciones, era un marco perfecto, pero lo ideal era que yo estaba en un cine junto a mi familia, como me contaba mi mamá que lo hacía cuando era una niña y su tía llevaba a los “pequeños” al cine del domingo por la tarde. 


Fuentes


Principalmente entrevistas





Pero también algunos diarios y sitios web









Investigación

Con los ojos del alma
Por: Federico Gonzalez Angelastro


La ley de servicios de comunicación audiovisual estipula que:
Las emisiones de producción nacional deben incorporar
 medios de comunicación visual adicional, para la recepción
por personas con discapacidades sensoriales, y personas
que puedan tener dificultades para acceder a los contenidos.
Esto incluye toda la programación nacional, desde películas
hasta programas de contenido cultural.


¿Qué son las películas audiodescriptivas? Durante una gran cantidad de años el cine fue, y sigue siendo, considerado como un entretenimiento para gran parte de la población mundial. Disfrutar de una película es una experiencia que hasta podríamos considerar como normal para cualquier persona. Sin embargo, aquellas que son no videntes carecían de la posibilidad de poder apreciar una película en la televisión o en cine.
A raíz de eso en la ciudad de Rosario comenzó a gestarse un proyecto, que ya estaba funcionado en España, que se llama cine inclusivo o películas audiodescriptivas. El nombre mismo indica cual es el eje del proyecto. Se trata de películas con descripciones en audio. Básicamente la audiodescripción es el sistema empleado en el cine adaptado para no videntes. Esta permite que las personas ciegas o con deficiencias visuales puedan tener acceso al cine y a otras manifestaciones culturales.
Las audiodescripciones suministran la adecuada información sonora que traduce o explica de qué manera el receptor pueda percibir dicho mensaje como un todo armónico y de la forma más parecida a como lo percibe una persona que ve. Su finalidad es proporcionar información sobre la situación espacial, gestos, actitudes, paisajes, vestuario y demás.
Esto significa que la audiodescripción debe aportar los datos necesarios para que la obra audiovisual sea perfectamente comprendida por aquella persona que no tiene la capacidad de ver. Además de esto, es una herramienta a nivel social para incluir personas con distintos tipos de discapacidades en actividades recreativas y poder disfrutarlas con sus amigos y familiares.
Este sistema funciona a través de un narrador que describe las escenas que se están viendo. Por ejemplo, si un personaje ingresa a un cementerio se dice que esa persona ingresa a un cementerio. De esta forma, el no vidente puede imaginar la escena. 
En sus inicios, el proyecto contó con dos patas fundamentales. Por un lado el centro de rehabilitación Luis Braille, en donde se encuentran las personas que hacen el trabajo de edición de las películas y la difusión de las mismas. Por el otro lado se encuentra el Instituto Superiorde Educación Técnica N° 18 (ISET 18) quien proporcionó desde el inicio del proyecto su estudio de grabación y alumnos de la carrera de locución para que lleven adelante este proyecto. Hay que destacar que hoy en día el centro Luis Braille cuenta con un estudio de grabación propio y de alta calidad que fue donado por el Rotary Club de Rosario.
La propulsora del proyecto de Películas Audiodescriptivas fue Elena Marull, quien era docente de chicos no videntes. “A veces veíamos películas, documentales o cosas en internet y era un ejercicio de  audiodescribirle a los chicos. Entonces pensé que esto había que hacerlo porque existe en todos lados del mundo menos en acá (NdR: Argentina) donde solamente se había hecho Anita”, comentó. Ese aspecto fue el impulsor que llevó a Marull a “tocar puertas” para conseguir apoyos y así fue como llegó al Centro Luis Braille, donde ya conocía a su directora Mariel Massari quien rápidamente se sumó al proyecto.
Luego del apoyo obtenido por el Centro Luis Braille, la docente se dirigió al ISET 18 donde consiguió la ayuda de Ricardo Rambaudi, director del instituto quien le brindó las instalaciones para que puedan llevar adelante su trabajo.
El recorrido en busca de ayuda se mantuvo presente pero la suerte dejó de estar de su lado y en la Municipalidad de Rosario no encontró el apoyo que necesitaba y por ese motivo llegó a la Fundación La Capital, quien se sumó al proyecto brindando su auditorio para que se puedan emitir las películas y gestionando la difusión del proyecto en el diario.
Con el Centro Braille, el ISET 18 y La Capital me las arreglé para empezar”, explicó Marull mientras comentó que “todo lo realizado fue a pulmón y ad honorem”. Luego agregó que el proyecto se potenció cuando el segundo año recibieron un subsidio por parte la Fundación Estudios del Litoral.
Las primeras películas que se han logrado emitir en el proyecto de Películas Audiodescriptivas fueron: “El secreto de sus ojos” y “Cuestión de principios”. Luego de recibir la contribución para cuatro películas más realizaron “El Ratón Pérez”, “Nueve Reinas” y “El hijo de la novia”.
Después de mucho intentar y, a partir de este año, cuentan con un subsidio por parte de la Municipalidad de Rosario donde aparecerán nuevas películas como “Viudas”, “Un novio para mi mujer” y alguna infantil que todavía no ha sido definida.
Por su lado, Mariel Massari –directora del Centro Luis Braille- consideró que el proyecto de películas audiodescriptivas “era algo que la sociedad se debía”, sobre todo por el lado de la inclusión dentro de las comunidades. Massari explicó que “cuando se habla personas con discapacidad, a veces se piensa solamente en la persona que tiene la discapacidad”, pero aclaró que no es así sino que es “la persona y su entorno”, debido a que su familia, sus amigos y las personas que lo rodean también están implicadas.  Justamente ese es el punto importante del proyecto de cine audiodescriptivo,  la inclusión del no vidente para que pueda disfrutar de un plan con toda la familia y que, de esa forma, se pueda sentir –y que valga la redundancia- “incluido”.
Con respecto a la realización de las películas, el proyecto de películas audiodescriptivas cuenta con varias personas que colaboran para que esto llegue “a la pantalla grande” de la mejor manera. Además de Elena Marull, quien trabaja en la edición de las películas, se encuentra Alejandro Guillermero. Alejandro tiene una importante disminución visual motivo por la cual casi no ve. Él realiza toda la parte que acuñe a la corrección de los guiones. “La sobrecarga de la información es uno de los principales problemas”, explica, mientras continúa diciendo: “Nosotros necesitamos que nos orienten donde se está desarrollando la escena. Por ejemplo en “Viudas” tiene una escena que transcurre en el cementerio y los personajes caminan entre los nichos. Yo no necesito que me digas que van caminando entre los nichos, panteones lo que sea. A mí si sitúas que están en el cementerio y yo me puedo imaginar el que yo quiera, uno del lejano oeste si quiero. Obviamente esto último no porque estoy inmerso en la trama y sé que no es así. Tampoco es necesario que nos digan cómo se visten, solamente con orientarnos en tiempo y espacio ya está. Hay silencios y uno quiere saber qué pasa en ese silencio, ahí es donde interviene el narrador y cuenta lo que está pasando”, concluyó.
Históricamente siempre se marginó a toda persona que tenga algún tipo de discapacidad, independientemente cual sea esa imposibilidad, por eso es tan importante que un grupo de personas intenten ayudar a aquellos que son no videntes y aporten su granito de arena sin esperar nada a cambio salvo una sonrisa por parte de aquella persona que debería ser incluida por el resto de la sociedad sin ningún tipo de juzgamiento.
El ideal utópico del Centro de Luis Braille queda reflejado en estas últimas palabras de Elena Marull a través expresa que es lo que ellos desean sobre esto proyecto:
“Que todas las películas puedan salir con audiodescripción, algo contemplado en la nueva ley de servicios y comunicación audiovisual. Pero por ahora, no sale. La idea es que cualquier persona ciega o con discapacidad visual pueda ir al cine con otra persona vidente y que puedan compartir ese programa juntos y que luego puedan comentar la película como hacen cualquier individuo que va al cine. Esto de hacerlo en algún lugar aparte está bien porque es lo que está a nuestro alcance, pero lo ideal sería que cualquier película del momento tenga la posibilidad de tener audiodescripción”. 
Por último, un fragmento de “El secreto de sus ojos” con audiodecripción: 




Etapa de Investigación


Después de realizar la selección del tema comencé a profundizar mis conocimientos sobre las películas audiodescriptivas.
Sobre esto encontré algunos artículos de difusión del proyecto en el diario “La Capital”, el cual apoya económicamente el cine inclusivo. Todo ese material me sirvió para planear de la mejor manera las entrevistas que iba a realizar después, como también seleccionar bien a quienes realizarle esas entrevistas.
Las personas a las que decidí entrevistar fueron aquellas consideradas fundamentales para el proyecto como es el caso de los guionistas Alejandro Guillermero y Mariela Rondelli. También la señora Elena Marull quien se encarga de la realización del mismo y la directora del centro Luis Braille Mariel Massari.
Una vez seleccionado a quienes iba entrevistar me dirigí al Luis Braille y pacté una fecha para visitarlos. Dentro del centro me brindaron sus instalaciones, como el estudio de grabación donde realizan las audiodescripciones, para llevar adelante las entrevistas en el lugar más adecuado posible.
Con el material recolectado en las entrevistas me fue más que suficiente como información para llevar adelante el proyecto de investigación de la mejor forma posible.




jueves, 16 de agosto de 2012

Espacio dedicado para el final de Redacción II del Postítulo en Periodismo y Comunicación de la UNR